Considera que cometió un homicidio que causó la muerte de Yenedey Jesús el 19 de mayo de 2023 en la capitalina calle Joaquín Costa
La Fiscalía Provincial de Las Palmas solicita un total de 17 años de prisión para José Miguel A.V., alias el Gallego, por ser el presunto autor del crimen del Bar Estrella, en el que falleció Yenedey Jesús N.M. y que ocurrió el pasado 19 de mayo de 2023 en la capitalina calle Joaquín Costa, de la zona Puerto de Las Palmas de Gran Canaria. Según el escrito de calificación provisional de la fiscal Teseida García, el Ministerio Público considera que los hechos son constitutivos de un delito de homicidio, un delito de lesiones y un delito leve de lesiones. Además, pide que el acusado indemnice a las víctimas y sus herederos con cantidades que suman los 64.200 euros. El procedimiento se enjuiciará ante un Tribunal del Jurado.
De acuerdo con el relato que presenta la Fiscalía, en la madrugada del 19 de mayo de 2023, sobre las 6.00 horas, José Miguel el Gallego acudió presuntamente al Bar Estrella tras haber estado de fiesta en diferentes locales de la ciudad. Cerca de los aseos del establecimiento, entabló una conversación con Ainhoa G.Q., a quien solicitó un beso. La mujer, según la acusación, le respondió que quería una raya de cocaína. Acto seguido, el acusado se dirigió a uno de los baños del local «donde sabía que podría conseguir la droga» y allí se encontraban Yenedey Jesús N.M., Daniel Pedro G.H. y Omayra del Pino S.S. En el interior del baño se produjo un altercado entre José Miguel y Yenedey Jesús, quien, siempre según el Ministerio Público, le propinó un puñetazo en la nariz que le causó una hemorragia nasal abundante. Tras este incidente, el acusado abandonó el local y se dirigió a su domicilio, situado en la calle Portugal de la capital grancanaria. Durante el trayecto, envió fotografías de su estado a su exesposa María R.D., a pesar de que existía en vigor una orden de alejamiento respecto de ella.

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Al ver el estado en que se encontraba, María y su hija, Olaya A.R. acudieron al domicilio. Una vez allí, según sostiene la Fiscalía, ambas le convencieron para regresar al bar a aclarar lo sucedido. El acusado se cambió de ropa, se limpió la sangre y, sin conocimiento de su esposa e hija, cogió un cuchillo de cocina que ocultó en su pantalón. Sobre las 10.00 horas regresaron los tres al Bar Estrella. María supuestamente accedió primero para comprobar si Yenedey Jesús seguía en el interior. Una vez confirmado, el Gallego entró en el local y se dirigió al baño, donde, de forma sorpresiva, sacó el cuchillo y apuñaló presuntamente a Yenedey en dos ocasiones en el tórax y otras dos en el antebrazo izquierdo. Las heridas torácicas, de carácter muy grave, afectaron a la cavidad torácica, provocando lesiones pulmonares y afectación de la pala ilíaca, lo que derivó en un shock hipovolémico que causó su fallecimiento horas después en el Hospital Doctor Negrín, pese a la asistencia médica recibida.
En el mismo contexto, y de acuerdo con el relato del Ministerio Público, el acusado hirió también a Omayra del Pino con el mismo cuchillo, provocándole una herida inciso-contusa en el glúteo izquierdo que requirió intervención quirúrgica y que dejó un perjuicio estético. Además, la afectada desarrolló un cuadro de estrés postraumático que precisó tratamiento durante noventa días.
Más heridos
En el forcejeo que se produjo para arrebatarle el cuchillo al procesado, Anthony P., dueño del bar, sufrió también una herida en la región frontal que necesitó asistencia médica, curando en 20 días y dejando igualmente una secuela estética.
La fiscal Teseida García García califica los hechos como constitutivos de un delito de homicidio, por el que solicita una pena de 15 años de prisión; un delito de lesiones, por el que solicita dos años de prisión, y un delito leve de lesiones, sancionado con una multa de 400 euros. Asimismo, interesa que el acusado indemnice a los herederos legales de la víctima con 60.000 euros, a Omayra del Pino S.S. con 3.000 mil euros más otros 400 por las secuelas, y a Anthony P. con 600 euros y otros 200 en concepto de secuelas. La Fiscalía también solicita que se prorrogue la situación de prisión provisional comunicada y sin fianza en la que permanece José Miguel A.V. desde el 22 de mayo de 2023.
Según detalla el escrito de acusación, dado que no será posible celebrar el juicio antes de que transcurran los dos años de prisión preventiva que establece la ley, el Ministerio Público interesa que se celebre la comparecencia prevista en la Ley de Enjuiciamiento Criminal para autorizar la prórroga de la medida cautelar de prisión. De este modo, el acusado podría continuar privado de libertad hasta la celebración del juicio, que tendrá lugar ante un Tribunal del Jurado de la Audiencia Provincial de Las Palmas, aún pendiente de constitución y señalamiento definitivo.

La acusación entiende que fue un asesinato e interesa 22 años
La acusación particular, ejercida en representación de un familiar directo de Yenedey Jesús N.M., eleva de forma sustancial la gravedad jurídica de los hechos investigados en el crimen del Bar Estrella. Esta parte solicita una condena de 22 años de prisión para José Miguel A.V., al que imputa un delito de asesinato con alevosía.
Esta calificación supone una diferencia esencial respecto al planteamiento de la fiscal, que califica los hechos como un homicidio. Mientras la Fiscalía considera que la muerte de Yenedey fue fruto de una acción violenta grave, la acusación particular sostiene que hubo una actuación premeditada y ejecutada con alevosía, en la medida en que el acusado habría sorprendido a la víctima en una situación de indefensión y habría planificado la agresión.
En su escrito, la acusación particular relata que José Miguel el Gallego, tras ser agredido en el bar en la madrugada del 19 de mayo de 2023, se dirigió a su domicilio, donde habría planificado su venganza. Según sostiene, se duchó, se cambió de ropa, tomó café y, de forma deliberada, cogió un cuchillo de cocina de grandes dimensiones —34 centímetros de longitud total, con una hoja de más de 20 centímetros— que escondió entre sus ropas. Luego, en compañía de su exesposa y su hija, acudió de nuevo al local y, tras una maniobra de distracción, accedió directamente al baño donde se encontraba Yenedey.
Según la acusación, el acusado se aproximó a la víctima y le asestó dos puñaladas en la espalda de forma sorpresiva. La primera de ellas alcanzó la zona lumbar mientras la víctima estaba de espaldas, agachado y taponándose la herida de la primera agresión. La segunda cuchillada, según describe el escrito, se produjo mientras Yenedey intentaba reaccionar, lo que refuerza para esta parte la existencia de una situación de absoluta indefensión.
Además, el ataque afectó a Omayra del Pino S., amiga de la víctima, quien sufrió una herida producida por arma blanca en el glúteo izquierdo. El escrito de acusación particular destaca que la agresión a Omayra pudo haber tenido un desenlace fatal si no hubiera sido porque la cuchillada fue frenada por un bolso que llevaba colgado en ese momento.
La acusación particular refuerza su relato señalando que el acusado presenta antecedentes penales firmes por delitos de violencia de género, lesiones, estafa y robo con violencia e intimidación, lo que, en su opinión, evidencia un patrón de conducta violenta que agrava su culpabilidad.
Frente a la indemnización solicitada por la Fiscalía —60.000 euros—, la acusación particular reclama que José Miguel A.V. indemnice a la madre y a la hermana de Yenedey con 200.000 euros cada una, por daño moral.
El escrito subraya que el ataque no fue fruto de un arrebato ni de una reacción impulsiva, sino un acto planeado y ejecutado con frialdad, eliminando cualquier posibilidad de defensa de la víctima. En consecuencia, la acusación particular sostiene que la pena adecuada para el acusado es de 22 años de prisión, tanto si el Tribunal del Jurado acepta íntegramente la calificación de asesinato con alevosía como, de manera subsidiaria, si entiende que concurrió un homicidio agravado por abuso de superioridad.